Películas de Serbia, Croacia, Suecia, Polonia, República Checa, Eslovaquia o Irlanda, por ejemplo, gratis, en pantalla gigante y con buen sonido. Cintas llamadas Clase B, de horror, fantasía, ciencia ficción, suspenso, independientes, de bajo presupuesto y más bajas posibilidades de llegar a una distribución masiva. Cine arte, de autor, transgresor, también independiente y difícil de acceder, sobre todo con condiciones aptas para disfrutarlo. Cine distinto, pensante, originario de distintos países, creativo y dirigido a niños y jóvenes. Todas esas opciones estarán al alcance de la mano y del bolsillo, a partir de este domingo en la ciudad.

Las autoridades de Cultura de la Ciudad de Mendoza lanzaron ayer un ciclo de cuatro festivales de cine que se desarrollarán durante julio y agosto.

El primero es la Novena Muestra de Cine Europeo, que desde el domingo, durante 13 días, ofrecerá una programación de 16 películas de distintos países con funciones gratuitas en la Nave Cultural. La posta continuará con una nueva edición de Mendoza Rojo Sangre, la versión local que reproduce parte del festival Buenos Aires Rojo Sangre, los jueves de julio en el Microcine, también gratis.

Ya en agosto aterrizará una vez más Bafici Mendoza, que copará las tres salas de la Nave Cultural con unas 40 películas, charlas, talleres y otras actividades. Este año la idea de Única Productora fue aumentar la presencia de directores y entre los que asistirán, estará el mendocino Alejandro Fadel. El realizador acompañará el estreno de su primera cinta, Los salvajes, con la que obtuvo el Premio de la Semana de la Crítica de Cannes y otro a mejor fotografía en el último Bafici.

El cierre del entramado festivalero llegará a mediados de agosto con Divercine, que presenta cortos, medios y largos del mundo que acercan a niños y jóvenes a un lenguaje cinematográfico distinto del comercial.